lunes, 20 de enero de 2014

Gamonal y sus efectos I

El #EfectoGamonal funcionó porque incluyó barricadas frente la policía, funcionó porque el vandalismo magnificado por las fotografías e imágenes de una calle plagada de llamaradas dio varias vueltas al Mundo en prensa, televisiones y redes sociales y nuevamente dejó en evidencia al presidente del gobierno, en visita de postureo político en la Una, Grande y Libre USA.

El #efectoGamonal funcionó, porque contaba con una avenida hecha guijarros a disposición de los vecinos (abierta por los especuladores), funcionó porque frente a los clientelismos del ayuntamiento arropado por una mayoría absoluta en las urnas, el discurso vecinal estaba respaldado por hechos que declaraban como evidente, el diálogo previo=cero, la corrupción manifiesta y demostrable, la demagogia unida a la mentira en el control de medios, el abuso de la fuerza legal frente a la manifestación pacífica (e ignorada por meses/años) antes de las primeras llamaradas de resistencia legítima.

Funcionó, porque los ciudadanos que viven bajo el #DefectoJamonal, al ver papeleras ardiendo, se lo hicieron encima, temerosos por la paz social que les permite disfrutar de sus jamoncitos y vermut en avenidas prescindibles, y muchos de ellos observan, temen, como la intransigencia del PP en todas las instituciones, está forzando en una espiral perversa a que los contenedores ardan bajo el #efectoGamonal de “corpúsculos ultraviolentos y atentados” contra el tapeo del domingo, como el de toda la vida y Dios manda.

Desde el 15 de mayo 2011, la protesta ocupó la calle y plazas, a los que la secundamos, creyentes como somos de la palabra, consenso y la razón, sin olvidar el sentimiento que nos empatiza con los que más lo necesitan en Madrid en Burgos, Dhaka o en Tombuctú..., el contenedor ardiendo no nos da miedo, al contrario sufrimos la impotencia dolorosa de los que desean acercar la llama, una llama que se rige no desde la impunidad sino desde el grito que denuncia, desde el grito sin eco; y sabemos que más de dos años de sordera y represión por los gobiernos de turno, solo es posible con la complacencia de los que viven todavía bajo el #DefectoJamonal, que son una todavía mayoría, afortunados ellos, no les deseo mal, pero tampoco su beneficio a costa del nuestro.

Y es una triste conclusión, que el ayuntamiento de Burgos (como ejemplo), asustado por la repercusión del #efectoGamonal en los ciudadanos escandalizados y anclados en el #DefectoJamonal haya decidido ceder ante la mala imagen local, nacional y mundial, ya viralizada en todo el Estado con réplicas, en lugar de haberlo hecho previamente por el sentido común y el diálogo con los vecinos del barrio, pues el mensaje dado ahora, es que vale más la llama que la lengua, pero esa es nuestra vergonzosa realidad, el ciudadano mayoritario está tan asustado, que solo un susto mayor le mueve, siquiera a mirarse el ombligo.

Los del #DefectoJamonal o esa mayoría que reclama la tapa de jamón y la concordia por vías del diálogo, se lo debería exigir a quienes les representan y antes de señalar a "radicales" sobre fotos o valorar el término "violencia" deberían participar en las concentraciones y manifestaciones (cientos de ellas en los últimos años, inmaculadas en el respeto al mobiliario urbano, amenizadas con palabra en pancarta y tantas veces buena música...) donde la represión que sufre el que en ellas participa, a pesar de su civismo, sí o sí, es de cinco Jotas, verdadera violencia, aderezada con incontables porrazos, bolas de goma, multas, detenciones y lo nuevo que venga, que vendrá, impunemente, indiscriminadamente, desproporcionadamente y otras mentes..., pero claro, desde la terraza o el restaurante donde nos sirven las raciones jamoneras, la sanción no se sufre, ni el desprecio, ni el golpe, ni la injusticia, solo las fotos de la prensa que el restaurante presta o las imágenes en pantalla plana entre partidos de fútbol, para cerebros que prefieren seguir siendo planos como una buena loncha de jamón cortada.
Jssdlvg

Nota: publicada originalmente el 20 de enero de 2014

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